Los esmaltes semipermanentes son espesos debido a su formulación única. Contienen una concentración más alta de resinas, que es aquello que consigue que el esmalte se adhiera a las uñas. También suelen tener una concentración de pigmentos más alta que los esmaltes de uñas regulares, lo cual significa… ¡una mejor densidad de color para ti!

Dado que los esmaltes en gel requieren ser curados bajo lámparas LED, la formulación debe ser lo suficientemente espesa para asegurar que no se extienda durante la aplicación y pueda curarse de manera uniforme bajo la luz.